Pozuelo Digital.- La Diputación de Ciudad Real incrementa este año con respecto al ejercicio de 2015 el Plan de Apoyo a los Municipios Pequeños a través de dos convocatorias dirigidas a ayuntamientos. El presidente de la institución provincial, José Manuel Caballero, ha dado a conocer esta mañana la primera de ellas, a la que se pueden acoger las localidades de la provincia que cuentan con menos de 3.000 habitantes, en total 73 pueblos que se repartirán, atendiendo a criterios estrictamente objetivos, la importante cantidad de 3.111.000 euros.
Se trata de una nueva actuación que pone en marcha el Equipo de Gobierno que se enmarca en lo que Caballero define como “columna vertebral” de la gestión. Es decir, dentro de las múltiples líneas municipalistas que impulsa la Corporación provincial tendentes, y en esta ocasión más, si cabe, a potenciar el medio rural e impulsar la fijación de población en el territorio ciudadrealeño, sobre todo en los núcleos poblacionales de menor entidad.
Los ayuntamientos podrán hacer frente a gastos de muy diversa naturaleza ya que la subvención se puede aplicar a prácticamente todas las competencias, incluso inversiones en obras o adquisición de bienes, en estos dos casos hasta un máximo del 30 por ciento de la ayuda concedida. Son recursos que, a juicio de Caballero, son muy agradecidos por los alcaldes, con independencia de su color político, porque se pueden utilizar para pagar la mayoría de los gastos que se originan, excepto nóminas de funcionarios, de personal laboral, de confianza o de políticos. Tampoco se pueden emplear para el pago de servicios que se sufragan por una tasa, ni gastos de fiestas o festejos.
Supone, en definitiva, una inyección económica nada desdeñable que, además, es “muy flexible”, porque permite justificar los gastos entre el 1 de enero de 2016 y el 31 de abril de 2017. Del mismo modo, se pueden incluir los que se hayan abonado en 2016 aunque se hayan producido en 2015. Y se les adelantará el 60 por ciento de la subvención al principio y cuando justifiquen la actuación se transferirá el 40 por ciento restante, con el objetivo de procurar liquidez a los ayuntamientos, “porque, sin duda, es la mayor dificultad que tienen”.
Caballero ha explicado, asimismo, que se han establecido varios tramos, hasta 1.000 habitantes, entre 1.000 y 2.000 y más de 2.000. En el primer caso se ha adjudicado un fijo de 12.00 euros, en el segundo de 16.000 y en el tercero de 19.000. Además, todos ellos sumarán 31’16 euros por habitante. Una ayuda que, según ha comentado, contribuye de manera decisiva al funcionamiento de los ayuntamientos. Es más, ha asegurado que, sin apoyos de este tipo, habría consistorios que tendrían dificultades para abrir sus puertas. En concreto, el pueblo que menos recibe es el que tiene menor población, Villar del Pozo, al que llegarán 15.084 euros; y el que más recursos reúne es Villarta de San Juan, puesto que se le han asignado 111.015 euros.
Caballero ha comentado que ya están trabajando en la próxima convocatoria, que se dirigirá a pueblos de más de 3.000 habitantes. Los técnicos preparan el documento bajo la supervisión, como ha ocurrido con el plan presentado hoy, de la vicepresidenta Jacinta Monroy, que acompañaba hoy al presidente de la Diputación y ha recibido su público agradecimiento por el trabajo realizado.
El presidente de la Diputación ha reconocido que, aunque este plan es necesario para los ayuntamientos de los pueblos pequeños, su llegada en esta ocasión no es tan perentoria como en el anterior mandato, cuando, según ha dicho, el Gobierno de Cospedal ocasionó un grave quebranto a los ayuntamientos porque no abonó las deudas contraídas por los servicios que prestaban a pesar de que correspondían al Gobierno regional. Ha remarcado que en la actualidad la Junta de Comunidades está al corriente de pago y la subvención de la Diputación viene a completar ese apoyo constituyendo un ejemplo más de coordinación entre administraciones.
