Con el objetivo de “ordenar, regular y dar seguridad” a quienes se pongan al volante estos once días y, sobre todo, con la mirada puesta en evitar víctimas -la Semana Santa pasada dejó 33 muertos en 13,8 millones de desplazamientos- Tráfico pone en marcha su dispositivo, como ya es tradicional, en dos fases.
Pozuelo Digital.- Desde el viernes 18 de marzo, a las tres de la tarde y hasta la medianoche del lunes 28, la Dirección General de Tráfico mantendrá un operativo especial en la red viaria con motivo de la Semana Santa, el periodo del año en el que más desplazamientos de coches se registran, hasta el punto de que las previsiones de viajes son este año mayores.
Más controles de alcohol y drogas, más vigilancia y radares en tramos peligrosos y carreteras secundarias, más atención si cabe a los excesos de velocidad tanto a pie de vía como desde el aire y nuevas cámaras. Todo un dispositivo para los 14,5 millones de viajes del mayor éxodo del año, la Semana Santa.
A las tres de la tarde del viernes 18 de marzo arrancará la primera, que se extenderá hasta la medianoche del domingo 20, un primer fin de semana en el que se prevén 3.450.000 desplazamientos.
No será hasta el miércoles 23 cuando comience el grueso de salidas. Tráfico iniciará a las 15:00 horas la segunda fase, la más importante por el incremento de ciudadanos que comienzan sus vacaciones ese día, víspera de las cuatro jornadas festivas o incluso cinco, ya que el lunes 28 lo es en Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana, Navarra, País Vasco y La Rioja. Las salidas de las ciudades son las que, a priori, concentrarán los mayores problemas circulatorios, pues la Semana Santa es la época del año en que más intensidad se registra en las carreteras, pues los viajes coinciden en origen y destino similares -zonas de costa, montaña, poblaciones con tradición religiosa y segundas residencias-, y, sobre todo, en los mismas días y horas.
Para que “todos vuelvan” de sus vacaciones y puedan contarlas y para que nadie crea que “los accidentes les ocurren a otros” y que son los demás conductores “los que cometen imprudencias”, la DGT despliega todos sus medios para vigilar “que se cumple la ley” y que la movilidad es “segura”.
Un total de 10.000 agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, 800 funcionarios y personal técnico en los distintos centros de gestión del tráfico y más de 13.000 empleados de empresas de conservación de carreteras y personal de emergencias movilizados junto a los recursos técnicos. Hasta doce helicópteros de la DGT sobrevolarán las carreteras, especialmente las secundarias -las más peligrosas- para controlar los excesos de velocidad.
Ocho de estas aeronaves van pertrechadas con el radar Pegasus o, lo que es lo mismo, una cámara dotada con un teleobjetivo que permite leer la matrícula del coche y detectar velocidades de hasta 360 km/h. Vigilancia especial a quienes pisan el acelerador más de lo permitido y también a los que se ponen al volante tras consumir alcohol y drogas porque estos días se incrementarán los controles preventivos a cualquier hora del día.
Tráfico avisa además que quienes sean detenidos por exceso de velocidad podrían ser obligados por los agentes a someterse a la prueba de alcoholemia o drogas y comprobar la documentación, un punto éste en que se incidirá estos días con comprobaciones del seguro del coche y la ITV en regla.
Se despliegan también radares móviles en los tramos especialmente peligrosos y que la DGT da a conocer trimestralmente en su web, al tiempo que pone en servicio cinco nuevos radares en Galicia: tres fijos (en la N-550 y kilómetro 55,800; en la AC-12 o curva de Biona, ambos en sentido A Coruña y en el punto kilométrico 244,850 de la N-525, en Orense) y dos radares de tramo (en la N-525 entre Benavente y Santiago y en la N-550 entre A Sionlla y Santiago).
Además se suman las cámaras en pruebas en tres autovías (las A1, A2 y A3) que vigilan el uso del cinturón de seguridad. Tráfico tienen pensado instalar a lo largo del año 270 de estas cámaras, de las que el 60 por ciento se colocarán en carreteras convencionales.
Para completar el dispositivo, la DGT no olvida otras medidas de regulación del tráfico como la instalación de carriles reversibles y adicionales, itinerarios alternativos, paralización de obras o la restricción de la circulación de camiones en las horas y días de más afluencia de vehículos.